La intoxicación por monóxido de carbono está creciendo a un ritmo alarmante en este año 2025. Según los informes más recientes, los casos han aumentado en un 57% en comparación con los datos del año anterior. Esta cifra pone de manifiesto la creciente amenaza para la salud de la población que representa este gas incoloro, inodoro e insípido.

El monóxido de carbono es un gas peligroso que se produce cuando los combustibles se queman de manera incompleta. Debido a que es difícil de detectar, muchas personas no se dan cuenta de que están siendo expuestas hasta que es demasiado tarde. Los síntomas de la exposición suelen ser vagos y fácilmente confundibles con otras enfermedades, lo que dificulta su diagnóstico.

La mejor manera de prevenir la intoxicación por monóxido de carbono es asegurarse de que todos los aparatos de gas estén correctamente instalados y mantenidos. Además, es recomendable instalar detectores de monóxido de carbono en el hogar para alertar sobre cualquier posible fuga.